viernes, 25 de mayo de 2012


Si nos decidimos por estimular al niño en su imaginación,será necesario ofrecerle múltiples oportunidades para acrecentar su experiencia,según Vigotsky…"La actividad creadora de la imaginación se encuentra en relación directa con la riqueza y variedad de  la experiencia acumulada…".
La literatura infantil por un lado deberá posibilitar un acercamiento placentero y gozoso al mundo de lo literario,tanto en sus tradiciones orales o escritas.
Por el otro potenciar un contacto estético y cultural con aquellas manifestaciones literarias que permitan tender un puente a la comprensión y apropiación del mundo de lo real cotidiano y del mundo de la imaginación y la fantasía.
 Cuando les contamos cuentos o historias complicadas, por ejemplo, hay que
hacérselos vivir para que los entiendan, hay que hacerlos jugar o representar, mimar,
remedar; si no, les resulta absolutamente incomprensible.(Jean Hebrard).
La literatura infantil que proviene de la tradición oral también abre la puerta al imaginario humano configurado por la literatura.El término de "imaginario"ha sido utilizado por los estudios antropológicos-literarios para describir el inmenso repertorio de imágenes,símbolos y mitos que los humanos utilizamos como fórmulas tipificadas de entender el mundo y las relaciones con los demás personas. 
A menudo los hallamos presentes en el folklore y   perviven en la literatura de todos los tiempos.
En todos los casos, las personas utilizan estas imágenes, personajes o mitos para mejorar su manera de verbalizar y dar forma a sus propios sueños y perspectivas sobre el mundo.Necesitan hacerlo, y la fuerza educativa de la literatura radica precisamente en que facilita formas y materiales para esa ampliación de posibilidades:permite establecer una mirada distinta sobre el mundo, ponerse en lugar del otro y ser capaz de adoptar una mirada ajena, distanciarse de las palabras usuales o de la realidad en la que uno está inmerso y verlo como si contemplara algo por primera vez.
Así pues, la literatura ofrecida a los niños y niñas les incorpora a esa forma fundamental del conocimiento humano.
Desde el campo de la psicología, la corriente psicoanalítica fue la primera en destacar la importancia de la literatura en la construcción de la personalidad.Bruno  Bettelheim usó los cuentos populares para ayudar terapéuticamente a los niños y niñas traumatizados por su experiencia en los campos de concentración nazis.
De ahí surgió su reflexión sobre el papel del folklore como material literario sabiamente decantado a través de los siglos como respuesta a los conflictos psíquicos, especialmente durante la etapa infantil, lo cual explicaría la constancia de su atractivo para los niños.(Bettelheim,1977).

3 comentarios:

  1. Hola a todas mis compañeras de grupo!!
    En cuanto a esta publicación puedo decir que es una síntesis teórica sobre algunos aspectos fundamentales de la literatura, desde la mirada de distintos autores. Lo considero un buen material para ser utilizado en por ejemplo: la fundamentación para una planificación donde se aborden temas literarios.
    Muchas gracias!! Saludos!!
    Guada

    ResponderEliminar
  2. Guada: está bueno el pensamiento que elaboraste a partir de varios autores. Rescato el papel terapeutico que tuvo la literatura en el ámbito de la niñez.
    Sería conveniente que actualmente se continuara con este tipo de actividades para ayudar a la primea infancia.

    ResponderEliminar
  3. Hola Ale si querés saber más acerca de como funcionan estos cuentos en relación a lo terapeutico,en el proyecto de los grandes cuentos tradicionales,puse mucha información que averigué en la web sobre lo que este autor Bruno Bettelheim investigó de los efectos terapéuticos y los traumas infantiles,lo incorporé porque me pareció sumamente interesante para todos los que trabajamos con niños pequeños y también como padres....

    ResponderEliminar